Albóndigas de merluza en salsa verde

Como preparar " Albóndigas de merluza en salsa verde "

Soy una fan incondicional de los productos que nos regala el mar. Pescados y mariscos sobre todo ,han pasado a ser alimentos frecuentes en mi dieta diaria.

Nunca o casi nunca como carnes rojas, la proteína cárnica que tomo es pollo, pavo y muy ocasionalmente algo de carne magra de cerdo.

Somos tres personas en casa y estoy un poco cansada de hacer dos comidas diferentes casi a diario.

Los otros dos integrantes de la casa son carnívoros y los días que toca carne roja, me tengo que preparar una comida diferente.

Hoy he querido que tomaran pescado, a parte de ser una delicia, considero que el pescado es fundamental en una dieta equilibrada.

Merluza en forma de albóndigas. No es original ni novedoso, pero os juro que estas " Albóndigas de merluza en salsa verde ", son una auténtica delicia. En casa desde luego no han puesto pegas, hasta mi hijo se las llevó para comer en el trabajo.

Una receta sencilla que admite múltiples variedades, tantas como cocineros las prepararen.

Os dejo mi versión, que por otra parte no tiene nada de original, pero lo que si puedo asegurar es que estas albóndigas salen super jugosas y que tienen un sabor a mar impresionante.

INGREDIENTES  32 Albóndigas de Merluza en salsa verde
650 gr. de merluza ( limpia de piel y espinas )
150 gr. langostino crudo ( limpio, sin cáscara )
65 gr. pan de molde ( 2 rebanadas )
50 ml de leche
2 huevos calibre M/L
1 cucharada de perejil picado
sal
Harina
Aceite de Oliva para freír
Salsa verde
50 ml. AOVE ( Aceite de Oliva Virgen Extra )
1 cebolla
2 dientes de ajo
150 ml. de vino blanco seco
Caldo de pescado
Sal y pimienta
2 cucharadas de perejil picado
Guisantes en conserva
1 cucharadita de fécula de maíz

PREPARACIÓN de Albóndigas de merluza en salsa verde

Paso 1

Necesitamos la merluza limpia de piel y espinas y los langostinos pelados.

Ya tenemos la carne y los cuerpos de los langostinos bien limpios.
Troceamos todo a cuchillo y lo pasamos por la picadora. Picamos a velocidad media y reservamos la carne picada en una fuente.

En la misma picadora, ponemos el pan, la leche, el perejil y los huevos. Batimos a máxima potencia y añadimos el batido a la picada de carne, mezclamos y reservamos.

Ajustamos el punto de sal y pimienta, cubrimos con film transparente y dejamos en reposo en frigo al menos 30 minutos.
La primera impresión será una masa demasiado blanda pero con el reposo en la nevera conseguimos una masa más compacta y fácil de manipular.

Por otro lado, cuanto más dura y compacta sea la mezcla, menos jugosas saldrán las albóndigas.

Paso 2

Mientras con las espinas y cabeza de la merluza preparamos un caldo corto de pescado. 

Ponemos agua fría en una cacerola junto con la espina y cabeza de la merluza. Llevamos a ebullición, bajamos la intensidad del fuego y dejamos cocer 15 minutos. Retiramos la espuma que se formará al hervir.

A parte, ponemos un poco de Aceite en una sartén donde sofreímos las cabezas y carcasas de los langostinos. Una vez bien dorados, aplastamos las cabezas para sacar todo el jugo. Incorporamos todo a la cacerola del caldo corto de pescado.

Cuando ya tengamos el caldo listo, colamos y reservamos.

Paso 3

Ponemos Aceite de Oliva en una sartén al fuego.

Mientras calienta el aceite, formamos las albóndigas. Las pasamos por harina y freímos en el aceite caliente, tan solo es necesario sellar la cobertura de harina, luego se terminan de cocinar con la salsa.

Fritas ya todas las albóndigas, reservamos y preparamos la salsa.

Paso 4

Ponemos Aceite de Oliva Virgen Extra en una cacerola amplia y pochamos la cebolla y el ajo picado.

Cuando comiencen a tomar color, incorporamos el vino blanco y dejamos cocer a fuego fuerte hasta que evapore el alcohol.

Añadimos un poco del caldo de pescado y trituramos hasta dejar una salsa fina y sin tropezones.

Paso 5

Colocamos las albóndigas en la cacerola, incorporamos la salsa y cubrimos con más caldo de pescado, salpimentamos y dejamos cocer a fuego suave 10 minutos, momento en el que añadimos los guisantes, que previamente hemos volcado en un colador y hemos pasado por el chorro de agua fría. Comprobamos el punto de sal y si fuera necesario es el momento de rectificar.

Dejamos cocer a fuego suave otros 10 minutos. Si en este momento vemos que la salsa está demasiado líquida. Disolvemos una cucharadita de fécula de maíz en un poco de caldo frío y añadimos la mezcla a la cacerola, dejamos cocer otro minuto, terminando el cocinado con un buen puñado de perejil picado, mezclamos y listo.

Un delicioso y sencillo plato de pescado, tradicional y que podemos tener preparado con antelación.